Hoy hablaremos de un libro especialmente potente y a la vez sencillo de todos los que pueda encontrar hoy día en las estanterías de la sección “inversiones y bolsa”. Me refiero al libro “El pequeño libro que aún vence al mercado”, escrito por Joel Greenblatt y editado por Deusto. Esta edición es una actualización la primera edición. Con algunas pequeñas variaciones después de la crisis vivida en el 2008.
Para empezar, me gustaría hacerle una pregunta ¿Si tuviera que dejar escrita la esencia de su saber en un pequeño resumen a sus hijos? ¿Qué les diría? Bajo esta premisa Joel Greenblatt escribió este libro, resumiendo los consejos que ayudarían a sus hijos a tomar las mejores decisiones de inversión. Y no se trata de una persona cualquiera, sino de uno de los inversores con mejor trackrecord de todos los que pisan el globo terráqueo. Convertir 2 dólares en más de 100 en 15 años tiene mérito. ¿No? Él lo ha conseguido.
En este libro el sr. Greenblatt nos ayuda a entender que encontrar una empresa con fundamentos interesantes no está reservada solo a los inversores más expertos sino que cualquiera puede saber cómo se hace. Greenblatt nos explica como podemos basarnos en dos conceptos sencillos para encontrar buenas empresas. Lo rentable que es y el precio que tiene. Con un estilo sencillo y directo, detalla su filosofía de inversión a lo largo de este breve y ameno libro. Desde el capítulo primero, es capaz de sumergirnos en el mundo de las inversiones con una facilidad solo al alcance de alguien que sabe entretener a un niño. Para esto comienza su explicación utilizando el negocio de un compañero de clase de uno de sus hijos y nos expone la disyuntiva a la que tenemos que hacer frente al decidir dónde invertir. Jason, la limusina y su negocio de chicles son la excusa perfecta para hacer entender a alguien que nunca ha leído nada de finanzas lo que tiene que buscar exactamente en una empresa.
¿Cuál es la filosofía de inversión que podrá encontrar en el “El pequeño libro que aún vence al mercado”? El factor fundamental lo determina, según nos explica el autor, el precio que hemos pagado por él. Por ejemplo, utilizando el ejemplo de Jason y su negocio de chicles pero de una forma un poco más “adulta” piense en lo siguiente. Si le vendo el 20% de mi empresa y esta gana 10.000 dólares cada año, usted tendrá derecho a recibir 2.000 dólares anuales. La gran pregunta que nos debemos hacer fijándonos en la rentabilidad es ¿cuánto estaría dispuesto a pagar por recibir esa cantidad? Ahí está el arte de la inversión. Obviamente si pudiera comprarla por una cantidad ridícula, por ejemplo 50 dólares, diría que es una buena compra. Por el contrario, si le pidiera el precio equivalente a las ganancias que supuestamente daría la empresa en los próximos 100 años me diría que estoy loco. Pues bien, todo dependerá del tiempo en que usted piense que puede recuperar su inversión. Lo que supone intentar adivinar el futuro. Y en esto, somos bastante mediocres.
Pero ¿si somos tan mediocres hablando del futuro? ¿Cómo podemos determinar el valor de la compañía según Greenblatt? Propone algo más sencillo, fijarnos en lo que ganó la empresa el último año. El gran problema de ver solo lo que gana una empresa es que puede esta ser muy cara, independientemente de lo que gane, y nosotros desconocerlo si no vemos más que este dato. Por otro lado puede necesitar endeudarse mucho para conseguir esa cifra. Por esto él se fija en dos ratios propios, similares a dos que se suelen utilizar a menudo en la inversión en valor, para determinar la rentabilidad de una empresa y el precio que tiene. Es lo que se ha llegado a conocer como la “magic formula”. ¿Quiere probar usted mismo? Le dejo la página web en la que podrá hacer sus pruebas usando las fórmulas que él propone, a https://www.magicformulainvesting.com Espero que disfrute de la lectura de este interesante libro.